miércoles, 16 de febrero de 2011

Proyecto Huella, lugar de memoria

http://prezi.com/5masmliihwv3/proyecto-huella-lugar-de-memoria/

En la Arena del Arte

Las condiciones sociales originan nuevos discursos-espacios, tal es así, que la comunicación, el uso de la tecnología, las “modas”, el “look”, y hasta el aspecto de las ciudades  responden a estos nuevos paradigmas, y ni hablar de la llamada “Identidad Nacional”, que más bien es transcultural, móvil.

Estas cualidades son asimiladas por el quehacer artístico de manera directa, tomando aquellos elementos que conforman el rizoma social para desplegar sus acciones, donde su estudio y realización se tornan interdisciplinarios.

‘’Los instrumentos que nos ofrece la tecnología son sumamente delicados y valiosos para el desarrollo cultural de los pueblos.
Si bien, nosotros los artistas podemos hacer uso de ella, no debemos olvidar el compromiso que tenemos con nuestro contexto y sobre todo que nuestro modo de actuar contribuya a enriquecer el espíritu humano.’’
CODA

Así, el arte construye desde nuestra codicia de saber, nos inquieta, generar búsquedas en una sociedad compuesta de múltiples identidades aisladas que se suman al campo dialéctico y estructural de la acción artística  y con ello se abren las posibilidades creadoras-expresivas, dando lugar a nuevos objetos artísticos capaces de establecer diferencias entre el presente y el pasado, entre lo real objetivo y lo real del arte.

El objeto artístico se hace depender de una actitud sustancial, donde el tiempo-espacio dotan al artistas de herramientas para desarrollar el proceso creativo, en el que el arte y el artistas no son exclusivamente el reflejo de una sociedad; sino que su papel es un constante discernimiento que tiene convergencia con la tarea de otros, pues tiene en sus manos el poder de modificar aquel concepto y así,  construir una nueva realidad cargada de fuerzas superiores que sobrepasan a lo natural pues éstas provienen del espíritu, donde la libre actividad de la imaginación no tiene los límites de la naturaleza, ni tampoco tiene a su disposición solo las formas naturales en sus múltiples apariencias, sino que éstas entran en estudio, disertación constante para construir un metalenguaje; dejando entrever algo  que supera la apariencia: el pensamiento.

Así, la contemporaneidad nos brinda la posibilidad de aprovechar las virtudes tecnológicas, los ordenadores, como las cámaras y demás dispositivos de captura de imágenes se han vuelto productores de sentido social y de contenido, llegando a convertirse muchas de las veces en condicionantes de nuestras capacidades de mirar y pensar, separando los medios de representación entre lo digital y lo análogo.

La imagen digital en muchos de los casos no es más que el referente contemporáneo, aproximación, para retornar a la parte análoga de la representación artística como lo es el procedimiento tradicional pictórico.

El sujeto-objeto, la realidad, se constituye en significante y significado, interno y externo, digital y análogo, observador y observado, reconstruible a imagen y semejanza de las posibilidades tecnológicas.

Bajo estas circunstancias, asir las cualidades propias de la tecnología a  la actividad del arte resulta inevitable e inesquivo. La fotografía y el escáner son tomados como medios para la búsqueda de elementos de representación, los mismos que nacen de la experiencia-relación  que  éstos y su contexto  otorgan, estos dispositivos son la más pura representación de la manipulación, pues, todo el procedimiento necesario para la consecución de la imagen es ya en sí una manipulación sin atenuantes, llegando a ser una herramienta importante para el proceso discursivo del arte actual.

Por lo tanto, crear equivale a manipular, dejando únicamente el concepto de realidad en la mente del espectador y no en el objeto artístico, ya que éste, es la representación simbólica que se deviene de la realidad objetiva, entonces no existe ningún antagonismo entre abstracción y figuración, mientras nos sugiera esta idea de realidad.

‘’Interpretar me parece antiartístico. El arte ya es un medio de hacer visible algo en forma de imagen. Con una interpretación prematura se arruina el efecto del cuadro. Primero hay que vivirlo, la primera vez, la segunda, la tercera. Y sólo después puede que sea interesante la interpretación.’’
Joseph Beuys

Erwin Peñaherrera Pereira. 2009
ARTISTA, Licenciado y Diplomado Superior en Estudios del Arte
Profesor de la Escuela de Bellas Artes. Facultad de Ciencias Sociales
UNIVERSIDAD TÉCNICA DE MACHALA

Bibliografía:
* TAPIES, Antoni. 1973. La práctica del arte. Ed. Ariel,SA, Barcelona
* FONTCUBERTA, Joan. 1997. El Beso de Judas. Fotografía y verdad. Ed. G. Gili, SA, Barcelona.
* BODENMANN - RITTER, Clara. 2005. Joseph Beuys. Cada hombre, un artista. Ed. A. Machado Libros, Madrid
* Documentos. COLECTIVO DE ARTE

Carrera de Artes Visuales. Fundamentación


La Carrera de Artes Visuales se inserta en el contexto provincial como la primera unidad académica superior en estudios artísticos, consciente de la importancia de las artes en el desarrollo integral de las sociedades, Tiene como propósito formar profesionales integrales capaces de fortalecer el desarrollo de las sociedades contemporáneas, reconociendo los procesos artísticos culturales nacionales en el marco de la diversidad cultural, emprendiendo propuestas motivacionales que estimulen las actividades en las instituciones dedicadas al desarrollo artístico cultural, y así, generar propuestas artísticas alternativas de acuerdo al desarrollo tecnológico de la contemporaneidad, para diseñar y ejecutar proyectos artísticos culturales, que sirvan para crear nuevas formas de desarrollo profesional autónomo y corporativo, pues “el arte se nos ha inculcado siempre como complemento, y conocemos su valor exclusivamente desde la parte estética, siempre sacralizado, mistificado, donde el valor del arte pasa por la parte económica. Esta tradición que llevamos a cuestas nos ha impedido asimilar el desarrollo artístico universal, ya sea por la falta de educación artística, o por aberraciones formalistas individualizadas, que no han podido confrontar al objeto artístico y descubrir su verdadero valor simbólico, tratándoselo bajos las mismas condiciones y motivos de siempre, en el mismo discurso, sin siquiera ponerse a pensar en qué lo origina y cuál es su finalidad actual.
Así es como se nos ha enseñado el arte, y a esto se suma la falta de medios de comunicación responsables con el arte y la cultura, y un inadecuado manejo en la orientación de la actividad artística dentro de las Instituciones Culturales, ya que no se llega a entender la problemática del arte y su desarrollo, pues se difunde información tergiversada de la realidad del arte llenando de certezas mal fundabas y manoseando conceptos, que lo único que logran es generalizar estos malos entendidos, convirtiéndose en verdades en  quienes consumen dicha información, necesitamos críticos, artistas comprometidos, público en general y espacios específicos donde se puedan desarrollar los conceptos artísticos actuales, las nuevas propuestas, los nuevos discursos, que generen medios de representación acordes a las necesidades de las sociedades contemporáneas donde el arte se encuentra en una relación activa con su contexto; donde se vuelve interdisciplinario.” (del texto, Apropósito del Salón de Junio 2010. Erwin Peñaherrera Pereira.)